Películas Malditas
¡Oh!
Poltergeist (I,II y III)
Julian Beck, Will Sampson, Dominique Dunne y la actriz principal Heather O’Rourke, quien murió de un shock séptico a los 13 años, tienen en común que su última película fue alguna de la saga Poltergeist. Como cereza del pastel, para la filmación de esta película se usaron esqueletos humanos reales, ya que eran más baratos que los falsos.
El Conquistador
Esta película se rodó en el desierto de Nevada, Estados Unidos, en un lugar donde se hacían pruebas nucleares. 25 años después, 91 de las 220 personas que participaron en la filmación entre los que se encontraba el actor principal John Wayne, sufrieron de cáncer.
El Exorsista
Siendo un clásico del cine, esta película cuenta con muchas leyendas. Durante la producción, un sacerdote tuvo que realizar un exorcismo en el set, luego de varios inconvenientes inexplicables. También los actores Jack MacGowran y Vasilliki Maliaros murieron tiempo después. Se dice que Linda Blair (la protagonista) predijo la muerte de un miembro de la producción mientras simulaba estar poseída en una escena.
El Bebé de Rosemary
Este filme de Roman Polanski obtuvo su maldición gracias al edificio Dakota de Nueva York, se dice que quien ingrese ahí morirá de forma trágica, el compositor Krzysztof Komeda murió a causa de un coágulo cerebral (al igual que uno de los personajes de la película), la actriz Sharon Tate, quien era esposa de Polanski, murió a manos de la secta de Charles Manson cuando tenía 8 meses de embarazo. Años después, en ese mismo edificio murió John Lennon, cabe mencionar que los miembros que mataron a Sharon, eran fanáticos de “Dear Prudence”, canción de la banda e inspirada en Prudence Farrow, hermana de la protagonista, Mia Farrow.
La Profecía
El actor Gregory Peck y el guionista David Seltzer fueron alcanzados por un rayo mientras volaban en aviones diferentes hacia distintos rumbos. Antes de eso, el mismo actor se salvó de morir en un accidente de avión. En la película se incluyen algunos animales, dos perros rottweiler atacaron a su cuidador mientras que un león mató a un guardia durante la filmación en un zoológico. Y no todo termina ahí, el productor se salvó de una bomba que el grupo terrorista IRA en su hotel, pero lo que la convierte en la película más maldita de todos los tiempos es el hecho de que John Richardson, encargado de efectos especiales, junto a asistente Liz Moore tuvieron un accidente, en el cual la asistente murió al ser decapitada por un vidrio, tal y como sucede en una de las escenas de la película. ¿Lo más espantoso? El accidente ocurrió cerca de un letrero que decía “Omen 66.6 km” (The Omen es el título en inglés de la película)
